viernes, 4 de febrero de 2011

Los problemas de Facebook



Como ya muchos sabrán, el principal problema de Facebook es la privacidad. Pero no es el único.
Esta red social creada en 2004 y desarrollada por el (hoy) archiconocido Mark Zuckerberg cuenta ya con mas de 600 millones de usuarios, la mayoría activos.
Gracias a Facebook Connect está integrando el perfil de los usuarios con otros sitios de la web, lo que genera (como se podrán imaginar) un crecimiento casi imparable.
Desde el punto de vista social, cada vez es mas difícil mantenerse al margen de este agujero negro.
En la actualidad parece que si no estás en Facebook entonces estás fuera del sistema, desconectado del mundo, apartado de la sociedad.
Aunque quieran darle un toque de seriedad, no debemos olvidar que la mayoría de los usuarios de Facebook son novatos, con pocos o casi nulos conocimientos informáticos, que se acercan a la red social atraídos por las fotos de sus amigos más cercanos.
Ninguna de esas personas seguramente ha leído los Términos y Condiciones antes de registrarse y publicar toda su información personal, subir las fotos de todos sus eventos y momentos íntimos familiares, y jugar a que mantienen una granja.
Todas las redes sociales tienen problemas, pero el asunto con Facebook es que debido a su enorme cantidad de usuarios esos problemas se multiplican.
Una de las cosas realmente criticables de Facebook es que hace uso de la publicidad de la información.
Hay que admitirlo: el objetivo de Facebook es transformar la vida privada en pública.
Toda la información que publiquemos, las fotos que subamos, las anécdotas que contemos, las personas con las que tengamos amistad o peleas... todo, en mayor o menor medida, estará ahí para todos.
Incluso ahora con la integración de Facebook en las búsquedas de Bing, cualquiera puede acceder a esos datos.
Eso es algo que gran parte de los usuarios lo saben: lo que hacen con Facebook es publicitar su propia existencia, entregar gratuita y felizmente al sitio sus vidas enteras para que haga con ellas lo que mejor le parezca.
Pero, ¿qué hace Facebook con toda la información que tiene de mas de 600 millones de personas?
Bueno, la información es un bien, y los bienes son materia de intercambio.
Al poder realizar un completo perfil de cada uno de sus usuarios, Facebook puede hacer muchas cosas con esa información, de las cuales se destacan (por supuesto) las cuestiones de marketing.
Los datos que puede proveer Facebook sobre cierto segmento demográfico son mucho mas importantes que los de cualquier encuesta probabilistica o estudio de mercado.
Como todos a esta altura ya conocen, Internet se basa en la publicidad para funcionar, por lo que la información que se tenga de los navegantes puede hacer la diferencia entre un negocio exitoso y un enlace esquivo.
Y esta es apenas la punta del iceberg. No son solamente los creativos del marketing a quienes les interesa mantener un perfil actualizado de gran parte de la población.
De manera que Facebook ha demostrado que intenta disminuir, y si es posible eliminar, la privacidad dentro de Internet.
Una vez estamos dentro de la base de datos, ya no es posible salir: por mas que decidamos borrar las fotos, el domicilio o el número de teléfono, e incluso cerrar la cuenta, la base de datos de Facebook tiene esa información segura y replicada hasta el infinito.
¿Conclusión? Facebook no es un sitio confiable.
Sin embargo, el problema mas grande no es el propio Facebook, ni sus políticas, sino sus propios usuarios.
Aunque es cierto que la red social tiene en su base de datos una mina de oro, eso es así porque mas de 600 millones de personas decidieron y deciden compartir su información cada día que pasa.
El problema de privacidad de Facebook no es por culpa exclusiva del sitio. En gran parte la culpa la tienen los mismos usuarios que lo usan sin ser conscientes de lo que hacen en Internet.
Si saben que Facebook comparte información con terceros, ¿porqué lo siguen usando?
Si no les agradan los Términos y Condiciones que aceptan al registrarse deberían decir: no, gracias. Pero el porcentaje de usuarios que los leen es mínimo, y eso ayuda a que la red social continúe creciendo.
Si Facebook decide cambiar esos Términos y Condiciones sobre la marcha, no les pregunta.
Peor: si les pregunta, no les importa.

En definitiva, llegamos a una cuestión básica: si no les interesa su propia privacidad, entonces adelante.
Pero si deciden usar Facebook es fundamental que sepan lo que eso significa.